Posteo extraído del muro de Facebook de Alicia Giles, viceintendente y presidente del Concejo Deliberante de Sauce de Luna.
"Da la impresión que algunos no soportan que una mujer se desempeñe en política y mucho menos presida el HCD, y esto sin importar el nombre de quién cumpla esa función ni el partido al que represente, es su estructura de pensamiento MACHISTA que los lleva a desacreditar permanentemente la capacidad de las mujeres y eso se ve no solo en la forma en que se dirigen a la presidencia sino también subestiman a sus propias colegas, tratándolas con mucha arrogancia y soberbia." (Alicia Giles)
"Da la impresión que algunos no soportan que una mujer se desempeñe en política y mucho menos presida el HCD, y esto sin importar el nombre de quién cumpla esa función ni el partido al que represente, es su estructura de pensamiento MACHISTA que los lleva a desacreditar permanentemente la capacidad de las mujeres y eso se ve no solo en la forma en que se dirigen a la presidencia sino también subestiman a sus propias colegas, tratándolas con mucha arrogancia y soberbia." (Alicia Giles)
No soy de actuar por impulso, por eso me he tomado un buen tiempo para reflexionar sobre los hechos ocurridos el miércoles (22/7/2020) en la sesión del Concejo Deliberante de nuestra localidad. Ahora, con la cabeza fría y sin la adrenalina de un momento muy desagradable y de mucha tensión, quiero compartirles lo que siento.
En primer lugar creo que se equivocan los que piensan que la agredida fue Alicia Giles, no lo siento personal, las agredidas son las mujeres y las maestras, no es un tema personal conmigo, es por un lado una cuestión de género y por el otro el menosprecio a una profesión.
Da la impresión que algunos no soportan que una mujer se desempeñe en política y mucho menos presida el HCD, y esto sin importar el nombre de quién cumpla esa función ni el partido al que represente, es su estructura de pensamiento MACHISTA que los lleva a desacreditar permanentemente la capacidad de las mujeres y eso se ve no solo en la forma en que se dirigen a la presidencia sino también subestiman a sus propias colegas, tratándolas con mucha arrogancia y soberbia.
El HCD está compuesto por siete concejales y la presidencia. De esos tres son docentes en ejercicio, tres somos docentes jubilados y dos son pareja de docentes. Es decir todos están vinculados de alguna u otra manera con el magisterio. Sin embargo en cada sesión se dirigen con un desagradable desprecio a las maestras y digo bien solo a las maestras mujeres. Tal vez suponen que nos menosprecian, pero la verdad que en lo personal me siento orgullosa de haber transitado muy responsablemente esa etapa de mi vida y haber desempeñado todos los cargos posibles en la escuela e incluso haber sido premiada por colegas del departamento Federal como Maestra Ilustre en el 2015.
El reglamento interno es del 2012, casualmente Aliano presidía el cuerpo y Orzuza era concejal. Ellos aprobaron el Art. 56. que dice “…Los concejales que hagan uso de la palabra se dirigirán invariablemente a la Presidencia, siendo absolutamente prohibidas las discusiones dialogadas y las alusiones personales irrespetuosas”, me eximo de agregar comentarios.
Por último quiero decirles, ya desde mi rol de presidenta HCD, que he cumplido con su reglamento interno al dar por concluida la sesión por haberse terminado el Orden del Día. Los cuerpos deliberativos NO PUEDEN TRATAR asuntos que no estén en el Orden del Día que es lo que quería hacer el bloque que integran Aliano, Orzuza, Tito y Fontana. Yo entiendo que hay vecinos que no conocen las normas internas que rigen nuestro funcionamiento por eso le dejo los enlaces (Reglamento Interno, Ley N° 10.027, Constitución Provincial), porque no es mi vocación polemizar con nadie, sino solo ilustrar como funciona.
En primer lugar creo que se equivocan los que piensan que la agredida fue Alicia Giles, no lo siento personal, las agredidas son las mujeres y las maestras, no es un tema personal conmigo, es por un lado una cuestión de género y por el otro el menosprecio a una profesión.
Da la impresión que algunos no soportan que una mujer se desempeñe en política y mucho menos presida el HCD, y esto sin importar el nombre de quién cumpla esa función ni el partido al que represente, es su estructura de pensamiento MACHISTA que los lleva a desacreditar permanentemente la capacidad de las mujeres y eso se ve no solo en la forma en que se dirigen a la presidencia sino también subestiman a sus propias colegas, tratándolas con mucha arrogancia y soberbia.
El HCD está compuesto por siete concejales y la presidencia. De esos tres son docentes en ejercicio, tres somos docentes jubilados y dos son pareja de docentes. Es decir todos están vinculados de alguna u otra manera con el magisterio. Sin embargo en cada sesión se dirigen con un desagradable desprecio a las maestras y digo bien solo a las maestras mujeres. Tal vez suponen que nos menosprecian, pero la verdad que en lo personal me siento orgullosa de haber transitado muy responsablemente esa etapa de mi vida y haber desempeñado todos los cargos posibles en la escuela e incluso haber sido premiada por colegas del departamento Federal como Maestra Ilustre en el 2015.
El reglamento interno es del 2012, casualmente Aliano presidía el cuerpo y Orzuza era concejal. Ellos aprobaron el Art. 56. que dice “…Los concejales que hagan uso de la palabra se dirigirán invariablemente a la Presidencia, siendo absolutamente prohibidas las discusiones dialogadas y las alusiones personales irrespetuosas”, me eximo de agregar comentarios.
Por último quiero decirles, ya desde mi rol de presidenta HCD, que he cumplido con su reglamento interno al dar por concluida la sesión por haberse terminado el Orden del Día. Los cuerpos deliberativos NO PUEDEN TRATAR asuntos que no estén en el Orden del Día que es lo que quería hacer el bloque que integran Aliano, Orzuza, Tito y Fontana. Yo entiendo que hay vecinos que no conocen las normas internas que rigen nuestro funcionamiento por eso le dejo los enlaces (Reglamento Interno, Ley N° 10.027, Constitución Provincial), porque no es mi vocación polemizar con nadie, sino solo ilustrar como funciona.