Me pasaron una frase que me puso a pensar y mucho:
“SI PUDIÉRAMOS SABER PRIMERO EN DONDE ESTAMOS Y A DÓNDE NOS DIRIGIMOS, PODRÍAMOS JUZGAR MEJOR QUÉ HACER Y CÓMO HACERLO” Abraham Lincoln
“SI PUDIÉRAMOS SABER PRIMERO EN DONDE ESTAMOS Y A DÓNDE NOS DIRIGIMOS, PODRÍAMOS JUZGAR MEJOR QUÉ HACER Y CÓMO HACERLO” Abraham Lincoln
Y… ¿Dónde estamos? En un país donde nos dicen que todo es por el bien común; en un país donde las decisiones se toman por decreto; en un país dónde nuestros abuelos son castigados; en un país donde los que producen son envilecidos; en un país donde los jóvenes que estudian y se preparan no tienen futuro; en un país donde prevalece la justicia social ¿para quiénes? y ¿qué tipo?; en un país donde tienen más derechos los que se los quitaron a otros; en un país donde lo evidente es incomprobable para la justicia; en un país dónde te controlan hasta lo que escribís; en un país donde la clase política y judicial no hace ningún tipo de sacrificios y excepto honrosas excepciones siempre terminan arrodillándose frente al poder de turno; en un país donde la educación, la salud y la seguridad siempre están en segundo plano…
Y… ¿Hacia dónde nos dirigimos? Hacia un país donde sigamos agachando la cabeza; un país en el que el trabajo esté tan degradado que seamos solo unos pocos los que lo consideremos digno; un país en el que no se pueda opinar diferente; un país en el que la justicia siga siendo ciega, sorda y muda; un país en el que se descarte lo que es viejo y no sirve; un país en el que el deterioro sea tal que sólo nos importe el sálvese quién pueda; un país para el que las generaciones futuras deban resignar su esfuerzo y sacrificio en pos de aquellos que nunca los hicieron…
Si debemos juzgar que hacer y cómo hacerlo para llegar a ese PAÍS… sigamos haciendo lo mismo. Pero creo firmemente que las cosas pueden cambiar, que podemos aspirar otro tipo de país.
Un país donde la suma de opiniones permita encontrar las soluciones a los problemas; un país donde los dirigentes no cambien todo lo bueno que hicieron los anteriores, sino que lo continúen; un país donde respetemos los derechos de “TODOS”, no sólo los de los más vulnerables; un país donde la educación, la salud y la seguridad sean bienes primordiales de la sociedad, formando y gratificando a sus profesionales como realmente merecen; un país donde valoremos a nuestros mayores; un país donde el trabajo y el esfuerzo se premien en todos los órdenes de la vida; un país donde la justicia sea transparente y la clase política se deba a su pueblo; un país donde los jóvenes elijan quedarse, seguir apostando y mejorándolo…
Pero para esto se deben hacer enormes esfuerzos y sacrificios, se deben tomar posturas firmes e innegociables, se deben tener políticas públicas duras y acordes a los tiempos que corren, se deben tomar decisiones impostergables que seguramente en muchos casos, afectarán sectores muy vulnerables de la sociedad y fundamentalmente se debe tener la grandeza de saber que aunque esto implique perder votos, si todos llevamos el mismo rumbo, el que viene puede continuar nuestra obra y hacer de nuestra querida ARGENTINA el país que todos queremos y nos merecemos!!!
